Artículo escrito por Mariano Capellino, CEO de Inmsa Real Estate Investments Management

Durante décadas, Estados Unidos fue considerado un paraíso en el mundo de las inversiones. Sin embargo, en el último tiempo, se está registrando un traslado significativo de fondos desde este país hacia Europa.

Y, a la hora de desglosar en qué sectores se registra esta tendencia, es el inmobiliario el que cobra mayor relevancia: en el caso del Real Estate, la mayoría de los 200 fondos más grandes del sector migraron sus capitales desde EE.UU. a Europa.

¿Qué factores explican la migración?

Debido a la elevada polarización y a las inestabilidades políticas y económicas, muchos inversores miran con preocupación lo que sucede en EE.UU.

Por ello, al momento de intentar explicar el creciente interés en el mercado europeo, se pueden mencionar varios factores, como su estabilidad económica y política.

A diferencia de otras regiones, Europa ha mantenido una base sólida, incluso en tiempos de crisis, y es esta estabilidad lo que resulta atractivo para los inversores que buscan minimizar riesgos.

Además, Europa ofrece una amplia gama de oportunidades en distintos sectores y mercados: desde bienes raíces hasta tecnología y energías renovables, los inversores pueden diversificar sus carteras y mitigar riesgos.

La posición del mercado inmobiliario

Pero, en un mundo en constante crisis, Europa no sólo ofrece estabilidad: el sector inmobiliario de ese continente se destaca gracias a que sus ciudades son reconocidas por su infraestructura de calidad y estilo de vida atractivo, lo que las convierten en excelentes oportunidades para inversiones inmobiliarias a mediano y largo plazo.

Ciudades como Londres, París, Madrid, Ámsterdam y Berlín están en el top 5 de las más atractivas en el Viejo Continente y esto se ve reflejado en que, en 2023, Europa recibió 65.200 millones de euros del total de 196.300 millones que percibió la inversión inmobiliaria transfronteriza mundial en Real Estate.

Oportunidades a futuro

Pero la cuestión más interesante es que, tanto en 2024 como en 2025, Europa podría seguir ofreciendo importantes oportunidades en el sector gracias a que el del Banco Central Europeo (BCE) ya recortó su tasa de interés, en 0,25 puntos, hasta el 4,25 %, y prevé aplicar nuevos recortes en los próximos meses.

En esta línea, es posible que la política monetaria del BCE reactive la economía europea, impulsando aún más las entradas de inversiones extranjeras desde EE.UU., Israel, Japón y Taiwán, entre otros.

Por su parte, países como el Reino Unido, Alemania, España y los Países Bajos serían los más favorecidos por estas tendencias.

Por ejemplo, este mismo año el Reino Unido podría atraer unos u$s 13.000 millones de las inversiones en el extranjero sólo desde EE.UU.

Por otra parte, en el caso de España, además de ser un destino atractivo para los latinos, gracias a cuestiones como el idioma, el clima o la gastronomía, esta región se destaca por ofrecer grandes oportunidades de inversión.

Actualmente, se estima que en el país ibérico hay activos por un valor de más de 100.000 millones de euros, de los cuales muchos de esos pueden adquirirse con importantes descuentos, de entre el 20% y 30% respecto a su valor de mercado, gracias a que están por ser ejecutados.

Pero, por otro lado, esta positiva tendencia en Europa se daría como consecuencia de que el año que viene los precios inmobiliarios en EE.UU. seguirán rezagados, registrando una caída del 10% ese año, y que no se recuperarán hasta 2026.

La explicación a esta situación la encontraríamos en la caída en la demanda de oficinas y el impacto en las valoraciones del resto de los activos comerciales tras la subida de tasas de interés, aunque un recorte por parte de la Fed es inminente.

Conclusión

En un mundo en constante cambio, Europa se presenta como un faro de oportunidades para los inversores.

Su estabilidad económica, la diversificación de las carteras y el atractivo del sector inmobiliario hacen que sea un destino prometedor.

Así, a medida que el BCE recorta las tasas de interés y las ciudades europeas se destacan por su infraestructura de calidad, el futuro parece brillante.

Por ello, no pierdas de vista estas oportunidades y anima a tus clientes a explorar el potencial europeo.

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Fuente: Cronista