Es el momento de aprovechar con especial atención el ciclo de este mercado, donde la compra realizada por especialistas en situaciones de distress para la venta posterior en un mercado con déficit de propiedades, puede ofrecer grandes oportunidades de rentabilidad.
«Quienes nos dedicamos a analizar los ciclos de mercados, estamos a pendiente de los indicadores que advierten que la enorme burbuja puede pincharse en cualquier momento».
“En Europa es distinto y ahí vemos una gran oportunidad. Allí las tasas siguen muy bajas y esto genera la posibilidad de poder tener un retorno muy atractivo no solamente sobre el capital que se invierte sino por la deuda que se toma”.
Compartimos el Encuentro en México para Inversores y Family Offices, que tuvo lugar el pasado 23 de agosto en el Hotel Hyatt Regency – Residence 1.
“El rendimiento que genera la renta de un activo es real, porque además del cupón (interés ofrecido) que se dice que deja, también te protege frente a la inflación. Por otro lado, la inversión Real estate global, de los grandes fondos, lo hacen con apalancamiento, es decir, tomando deuda, por lo que el costo es equivalente a la inflación”
“La clave para invertir y tener un plan de contingencia es tener claro en qué mercado invertir”
Compartimos imágenes del encuentro que tuvo lugar el pasado 23 de agosto, en el Hotel Hyatt Regency – Residence 1. En esta oportunidad, estuvo presente Rodrigo Gómez Alatorre, Socio Fundador de Ki Capital, como moderador, junto a los expositores Christian Pieck Martínez, Head Productos Financieros SPB Banca Privada Banco Santander México, Mariano Calderón V, Socio de Santamarina + Steta y Mariano Capellino, CEO y Fundador de INMSA.
Compartimos el Encuentro para Inversores y Family Offices, que tuvo lugar el pasado 17 de agosto en el JW Marriott Miami.
El nivel de inflación que se vive a nivel global muestra que las inversiones en el Real Estate no están protegidas a largo plazo sobre este indicador, pues la plusvalía ha sido mermada por el incremento en los precios.
Dentro de los inversionistas se tiene la creencia que los ladrillos pesan más que los papeles a la hora de invertir en activos inmobiliarios, pero la realidad dista de dicha percepción.